Abril de 2024 marcó un momento crucial para Colombia con la visita de la Comisión Interamericana de Derechos Humanos (CIDH), resaltando la compleja relación entre los derechos humanos y la transición energética. En este escenario, Ana Catalina Herrera, representante de la Oficina de CNV para América Latina y coordinadora nacional del programa CNV Internationaal, destacó la importancia de incluir a los trabajadores en la transformación del sector energético.
El compromiso y el cambio durante la visita de la Corte
Encabezada por la Comisionada Roberta Clarke, la delegación de la CIDH se desplazó entre el 15 y 19 de abril por regiones clave como Bogotá, Antioquia, Magdalena y La Guajira, con el fin de inspeccionar cómo las distintas formas de violencia afectan los derechos humanos y supervisar la implementación del Acuerdo de Paz de 2016. Sin embargo, también se tuvo en cuenta cómo la transición energética podría influir en estos contextos, especialmente en las dimensiones étnico-raciales y de género.
Desde CNV Internationaal: Inclusión y Protección Laboral en la Transición Energética
En una intervención ante la CIDH, Ana Catalina Herrera, enfatizó en la urgencia de centrar la atención en los derechos de los trabajadores del carbón durante una transición hacia fuentes energéticas más limpias.
Insistió en que esta transformación no debe conllevar un desplazamiento insensible de quienes han dependido de la industria del carbón durante décadas. Señalando que la transición energética no sólo debe ser limpia, sino también inclusiva, ofreciendo nuevas oportunidades, seguridad y protección social a quienes más riesgo corren de ser marginados:
“Hoy deben existir acuerdos mínimos y garantías para que los cierres mineros no traigan mayor precarización por medio de la tercerización, y violación de derechos humanos laborales, es necesario garantizar medidas específicas de acceso a la protección social de quienes dependen de este sector.
El continente americano requiere que la Comisión Interamericana brinde un instrumento que guíe los cierres mineros, las renuncias y los ceses de operaciones”.
Resaltó también la necesidad de que el proceso de transición contemple medidas de reparación integral de los daños que ha causado el extractivismo en países de América Latina y en especial en Colombia, apelando a la progresividad de los derechos económicos, sociales y culturales por medio del respaldo a la actual Reforma Laboral:
“ [...], la progresividad de derechos económicos y sociales está en riesgo en Colombia y hay una clara tensión con los derechos ambientales que debe ser superada, seguramente utilizando el Test de Proporcionalidad, esperamos sirva de inspiración las voces del movimiento social y sindical.
Hoy más que nunca debemos tener en el centro el derecho a la reparación integral”.
El papel central de la CIDH en el respeto de los derechos laborales
La CIDH, como órgano de la OEA, no solo promueve los derechos humanos, sino que también actúa como defensor de estos en transiciones de gran escala. Escuchando a una amplia gama de actores, la Comisión busca entender las preocupaciones laborales directamente de las voces afectadas, elemento esencial para formular recomendaciones que promuevan la equidad.
Estrategias para avanzar
Para CNV Internationaal, es crucial que Colombia implemente estrategias que:
- Impulsen espacios de diálogo entre trabajadores, empleadores, y gobierno, asegurando que todas las voces sean consideradas en la gestión de cambios económicos y laborales.
- Garanticen la protección y seguridad social para amparar a los afectados por los ajustes económicos.
- Faciliten la reconversión y capacitación de trabajadores en áreas afectadas por los cambios económicos, asegurando que tengan las habilidades necesarias para prosperar en las nuevas industrias.
- Impulsen políticas y programas que fomenten la diversificación de la economía, enfocándose en sectores emergentes y sostenibles con el fin de reducir la dependencia en industrias tradicionales.
La política de apertura de Colombia hacia la cooperación internacional, demuestra un compromiso hacia el respeto de los derechos humanos. La transición hacia una economía más sostenible es, por ende, una oportunidad no solo para cumplir con los compromisos climáticos sino para construir una sociedad más justa. Colombia se encuentra posicionado para ser uno de los países líderes en que la equidad puede ser el núcleo de la innovación energética.
Fecha de publicación 22 04 2024